Bienvenido a mi Teatro: 03/07

11 marzo 2010

el tres y el cuatro

CUMPLEAÑOS

Esta vez no tengo ningún regalo, excepto mi vida.

09 marzo 2010

Lentamente me opaco, me apago, me pierdo, me siento en el limbo, estoy aquí y estoy allá, y aún así, sigo en mi cama... estoy acostada, me siento volar pero estoy acostada, con miles de dilemas en mi cabeza... Pesadamente me levanto, me pellizco y me duele, me miro al espejo, soy la misma, cierro los ojos, y respiro profundo, los abro de nuevo y me vuelvo a mirar...Espera, tengo alas? si! tengo alas! alas como de mariposa pero porqué me siento como una oruga torpe dentro de su cascarón?Estaré enloqueciendo? mi conciencia se escucha en mi cabeza retumbando! Salta! vamos salta! Pero qué me pasa? Ahora escucho voces? Estaré alucinando? no lo creo, estoy en mis cinco sentidos...o no me doy cuenta??? Pero respóndeme conciencia, despertaré?habrá un mañana? habrá un momento para mi? habrá un habrá? Será o no será? y el Futuro? Llegará? Supiro, me muerdo las uñas, me acuesto de nuevo y cierro los ojos, y pienso y me pregunto, lo que un día fué, volverá? y lo que hoy es, dejará de ser? estaré soñando? o solo estoy pensando incoherencias? es mi mente la que está volando o yo estoy despierta aquí escribiendo esto? No lo sé, solo sé que quiero seguir soñando que esto lo estoy soñando... Soñando que todo esto es un sueño, que Dios es un sueño, que todo el dolor vivido, que toda mi vida es un sueño, una mala pesadilla, que esto no existe, que nada es real, que es una fiebre, un borrador en mi mente, un espacio de locura, un lapsus, un trance en medio de mi caos existencial... pero espera un momento!!!!
Estoy dormida? si es así, no me despiertes, déjame seguir soñando...

08 marzo 2010

Me han cortado mis alas!!!! me las cortaron...

...de repente lo único que pude sentir fue ese dolor que ya conocía, es como una estacada, como un puñetazo bien profundo que hace que sientas en un segundo un escalofrío que recorre cada parte del cuerpo y que en ese mismo instante los ojos son capaces de llenarse de esas gotas saldas que hace tiempo no producían, que hace tiempo habían olvidado.

Sí, soy egoísta, por pensar solo en mí, pero ciertamente es la primera vez que lo hago, siempre anteponía sus problemas, sus angustias, sus miedos, su felicidad, sus deseos - de todos - y lo único que lograba era rescatar mi cuerpo que ya había caído después de haber recibido, mas bien, de no haber recibido absolutamente nada.

Nunca lo había preguntado - creo que nunca lo había necesitado realmente - ¿qué hago?

No tengo una respuesta, estoy bloqueada, tengo incertidumbre, miles de dudas...posiblemente sí sé la respuesta, pero no la quiero decir, no la quiero ni pensar.

¿En qué momento fui perdiéndote? ¿En qué momento te dejaste vencer? ¿No ha valido la pena nada?

La única respuesta que conseguí fue: "no puedo (porque no me nace, porque no quiero, todo iba implícito) decirte las cosas que tu quieres oír."

Pero es que se te olvido algo... nunca pedí que dijeras nada, pero tuviste la necesidad de decirlo, no podías callarlo más, querías gritarlo!!! [No puedo decirte que te amo porque NO te amo*] pero fuiste cobarde y volviste a callar. Lo adiviné al momento, hace tiempo lo sentía, hace tiempo callabas, evadías mi mirada.

Tan sólo trate de sostenerte, pero fallé, porque primero necesitaba la suficiente fuerza como para poder ofrecerte esa estabilidad, eso que tú tanto necesitas. Perdón.

Y estoy tan llena de resentimiento, llena de coraje, llena de tristeza, pero sobre todo, llena de un amor que pende de un hilo invisible, intangible, inexistente.

Me perdí yo misma desde el mismo momento en que tiré una parte tuya, tu sangre, nuestra descendencia, ahí perdí el camino, ahí perdí todo.

Lo pediste, me voy. Y aún así volvería a vivir cada instante que pase a tu lado.

* un día me dijiste lo contrario (msje 3-feb-2010)

Eres y serás para mí lo mas grande que haya visto nunca, en la inmensidad de la vía láctea, el amor de toda mi vida. No borres lo vivido, mantenlo en tu corazón.

8 de marzo!

Ser mujer para mi es luchar.

Luchar por quitarnos las cadenas de esa educación machista que nos convierte en "cuasimujeres"

Ser mujer es usar ambos hemisferios cerebrales, es hacer muchas cosas a la vez

Ser mujer es hacerse consciente de que no porque no seamos iguales, somos menos.

Ser mujer es enfrentarse a un sistema diseñado por y para los hombres, es disfrutar tomar posiciones por sí mismas, es ejercer una sexualidad responsable, es cuidar, pero tambien cuidarse.

Un saludo especial a las madres que luchan cada día por el pan de sus hijos, sin descanso, sin flaquear jamás.
a las ejecutivas que distribuyen el día entre reuniones y biberones
a las profesoras que educan a sus hijos y a los míos,
a las mujeres que paren con amor y alegría a su séptimo hijo como si fuera el primero,
a la mujer que se levanta a las 5 de la mañana a hacer el pan
a la mujer que quiere ser más en la vida
a la mujer valiente, a la madre soltera,
a todas, FELIZ DIA.

No Quiero Olvidar

No quiero perderme en mi mismo laberinto. Las cosas que matan, las cosas que mueren, los días que inventan, las noches que invaden. Muchas cosas que se suceden a lo largo de nuestra vida, a pesar de en muchos casos, hacernos daño o doler porque ya ese instante termino, esas cosas que a veces son lo mismo y a veces no, no queremos olvidar. Otras queremos borrarlas para siempre y están grabadas en nuestras memorias y con su recuerdo nunca deja de existir esa lágrima en la mejilla, que tampoco se olvida. Yo quiero recordar para siempre cada instante, malo, bueno. no quiero olvidar los dias, las horas, los meses, los años. No quiero olvidar que hay mañanas que amanecen mejor, que hay sonrisas con motivos para seguir sonriendo, no quiero olvidar los “porque”, ni los “como” que a diario me pregunto. No quiero olvidar que ciertas miradas con solo ver sus ojos me basta para descifrar que esta pasando, no quiero olvidar, que mi mirada dice siempre algo más. No quiero olvidar que el mundo lo construyo yo cada minuto, y si pierdo un minuto pierdo mi mundo. No quiero olvidar que la risa no siempre es más fácil que el llanto, pero tampoco siempre es más divertida. No quiero olvidar que hay amores que duelen, amores que gozan y otros que ríen. No quiero olvidar algunos besos, algunos lugares, algunas personas. No quiero abandonar los días, las caricias, los perfumes que se siguen sintiendo, los mares de llanto. No quiero algún día olvidar como me sentía en mis cumpleaños de niña, o cuando abría un regalo al lado del arbolito de navidad. No quiero perder mi expresión mirando fuegos artificiales, no quiero nunca nunca perder mi sonrisa de esos momentos. La primera vez que vi la inmensidad del mar y me sentí tan chiquitita, mis muñecas, mis inventos, mis colecciones de miles de cosas diferentes. No quiero olvidar que ame y me amaron, que amo y aman. No quiero olvidarme de que el amor, existe. Y que suele doler mucho más que el desamor en algunas oportunidades. No quiero olvidar los besos que llevo contados. No quiero olvidar mi primer te amo, mi primer adiós. No quiero olvidar los llantos de cada 31 de diciembre. No quiero olvidar las historias, los caminos, los días felices, los días tristes. Las personas que están y las que se fueron, no quiero olvidar a todas aquellas se van a ir. No quiero olvidar, no quiero perder cosas, no quiero algún día dejar de sentir, no quiero que con el paso del tiempo me olvide de disfrutar el día a día. Aquellas tardes jugando en casa. Aquellos momentos, Aquellos años. Aquellos días. Aquella vida. No quiero olvidar que de a poco todo se olvida.

Será por eso, porque los dos llegaron al lugar cargados con su historia, porque los dos llegaron al beso con el mismo hermetismo, encerrándolo dentro de la piel. No se entregaron, solo hubo un intento...apenas un intento. Un barco que quiso llegar a puerto pero se dejó arrastrar corriente afuera hacia cualquier tormenta, o hacia la misma tormenta de siempre... Ella llevaba en sí largas caminatas por mañanas de sol, cansancios de tardes amarillas, el oído alerta para escuchar alguna llamada que nunca sonaría, mil siestas para dejar de soñar, la mano preparada para sacar un par de monedas del bolsillo interior de la cartera y subir a algún colectivo, la lengua fría por un helado de frambuesa saboreado sin prisa. El llevaba pegado a sus talones el polvo de las mismas calles andadas y desandadas varias veces al día, números de teléfonos que ya se habían mezclado, fotos de novias en su billetera y esas ganas de...ganas de nada, o de animarse a llorar tal vez...Y además, llevaban otras cosas. Canciones de moda que se les pegaron y cantaron bajo la ducha, quizás las mismas canciones a un mismo tiempo, pero en lugares diferentes. Tal vez algún asomo de alegría vivido a un tiempo, pero separados. Tal vez alguna tristeza inmensa en una misma noche, pero bajo techos distintos. Creían saber todo el uno del otro. ¿Qué puede haber de misterioso en la vida de una persona? Sin embargo, no sabían nada, porque ignoraban nombres y fechas y lugares donde habían pasado los veranos. Hubieran tenido que contarse todo. Hubieran tenido que hacer una larga lista de cosas, de sorpresas, de lágrimas, de sonrisas, de sobresaltos, agonías, desencantos, temores, de películas y libros y de canciones sabidas de memoria, de casualidades, descubrimientos, de aceptación y de rechazos...Hubieran tenido que pronunciar cientos de miles de palabras que fueran descascarando la soledad hasta dejar el cuerpo preparado para la entrega, para la confianza. Hubieran tenido que atreverse a jugar una carta, el todo por el todo, quitarse la máscara, decir la verdad, sea cual fuere, mostrar las lastimaduras, las arrugas, las rajaduras, mostrarse... Pero no se animaron, les faltó valor. Ellos dijeron que les faltó tiempo...pero les faltó valor. Estaban engolosinados con su propia tristeza, no querían tomarse el trabajo de quitarse las siete capas y ver la desnudez de la felicidad... porque temían que después de la séptima capa apareciera de nuevo la terrible y despiadada soledad, de la cual ya eran prisioneros. Y entonces caminaron juntos unos pasos. Y entonces se estrecharon fuerte, se besaron cerrando los ojos porque cada uno quería mirarse a si mismo, nada mas que a si mismo, y no al otro...aunque los besos siempre se dan con los ojos cerrados... Estuvieron acariciando el límite, lo exterior, la impenetrable puerta, la puerta de cien cerraduras. Ninguno de los dos quiso buscar las llaves, ninguno de los dos quiso empezar a abrir, ninguno de los dos quiso saber qué había en realidad detrás de la puerta que los separaba. Por eso fracasó el encuentro. Por eso...Porque cada uno fue a encontrarse consigo mismo. Porque cada uno fue a alimentar con llantos su propia soledad. Porque cada uno llevó su distancia y la puso en el medio. Y a pesar de los besos, y a pesar de la parodia del intento, y a pesar de ser un hombre y una mujer llenos de posibilidades, se dijeron adiós y lloraron, pensando que lloraban por decirse adiós, pero sabiendo que cada uno lloraba por sus viejos dolores de adioses anteriores, por otros intentos y otras historias. Y porque ya nunca podrían borrar las distancias que los separarían de ellos y de los otros que quisieran alguna vez, acercarse a ellos.