22 mayo 2010

Da lo mismo que no existas a que existas y no estés cuando mas te necesito.

21 mayo 2010

Conversaciones conmigo misma: En busca de la huida

- Hola.
- Hey.
- Busco amor.
- Pues lo has encontrado, reina.
- Busco un compañero.
- Mírame, si casi vamos vestidos igual.
- Busco un amante.
- Por si lo demás falla - dice sacando un enorme dildo.
- Busco a alguien que se preocupe por mí.
- Tendrías que ir al médico, no me gusta la pinta de esas bolas en tu cabeza.
- Busco alguien que me comprenda.
- Yo sí que te entiendo. No, en serio. Te conozco.
- Busco a alguien sincero.
- Estás un poco gorda.
- Busco a alguien distinto.
- ¿Distinto?
- Distinto a ti.
- Y tú.
- ¿Qué?
- ¿Y tú qué ofreces a cambio?
- ¿Yo?
- Sí.
- Yo te ofrezco mis necesidades.


20 mayo 2010

me siento cansada, muy cansada
no existe la salida
creo que me embalsamaré
creo, no, no creo
inconsistencias... muchas
tiempo, llega pronto
1er paso hacia
miedo, tiemblo
borboteo constante de lagrimas acompañado de no resignacion
alma perdida que busca
¿consuelo?
223 km
3-4 hrs
complicaciones? muchas, sobran, pero a MI no me limitan
tu?




19 mayo 2010

Me olvido de quién soy, me vuelvo loca, hace frío, amanece, sigo, escupo, voy al cine, me enojo, escribo, me suicido, resucito, afirmo, niego, grito, dudo, creo, odio. Amo, acaricio, necesito, te recuerdo, te busco, te maldigo, digo tu nombre a voces, no te veo, te amo.
Te deseo, te deseo, te deseo, te deseo
_____________________________


No hizo falta un reloj para calcularlos. Fueron segundos. Fueron tres palabras que retumbaron, cinco pestañeos dentro de una habitación verde, entre risas, alborotos y alegrías ajenas, una habitación en la que se encontraba una mesa redonda, en medio de todo, en medio de nada. Ni siquiera fue un minuto. Fueron segundos, tan solo segundos. Me doy miedo. ¿Cómo puede ser que en cuestión de segundos mi ánimo pueda variar de esa manera? Es absurdo, es ilógico, es desagradablemente patético. Deduzco que ninguno de los dos estados fueron reales: no fue real la idiota sonrisa que reflejo mi cara al escucharte proseguida por esa tonta risa defectuosa sin motivos observando aquella escena, y sí, si fueron reales las dos lágrimas de la segunda situación frente a tus ojos, frente a lo que creí mi luz. De todas maneras me doy miedo, y me detesto cuando me pasa esto.
Porque es justamente en estos instantes cuando aparece "mi misma" y me dice claramente que hacer y aún así sigo ignorándola, cuando en otras "vidas" siempre le he prometido que jamás dejaré de escucharla, pero siempre, siempre hay una terrible excepción.
Hay dos caminos por los cuáles dirigirme, no más, dos únicamente : continuar o detenerme.
¿Qué dolerá menos? ¿Podré estar exenta de cicatrices esta vez? No creo, al parecer va a ser la peor.
¿Cómo
puede
una ciclotimia
caer
en tal exceso?



No Quiero Olvidar

No quiero perderme en mi mismo laberinto. Las cosas que matan, las cosas que mueren, los días que inventan, las noches que invaden. Muchas cosas que se suceden a lo largo de nuestra vida, a pesar de en muchos casos, hacernos daño o doler porque ya ese instante termino, esas cosas que a veces son lo mismo y a veces no, no queremos olvidar. Otras queremos borrarlas para siempre y están grabadas en nuestras memorias y con su recuerdo nunca deja de existir esa lágrima en la mejilla, que tampoco se olvida. Yo quiero recordar para siempre cada instante, malo, bueno. no quiero olvidar los dias, las horas, los meses, los años. No quiero olvidar que hay mañanas que amanecen mejor, que hay sonrisas con motivos para seguir sonriendo, no quiero olvidar los “porque”, ni los “como” que a diario me pregunto. No quiero olvidar que ciertas miradas con solo ver sus ojos me basta para descifrar que esta pasando, no quiero olvidar, que mi mirada dice siempre algo más. No quiero olvidar que el mundo lo construyo yo cada minuto, y si pierdo un minuto pierdo mi mundo. No quiero olvidar que la risa no siempre es más fácil que el llanto, pero tampoco siempre es más divertida. No quiero olvidar que hay amores que duelen, amores que gozan y otros que ríen. No quiero olvidar algunos besos, algunos lugares, algunas personas. No quiero abandonar los días, las caricias, los perfumes que se siguen sintiendo, los mares de llanto. No quiero algún día olvidar como me sentía en mis cumpleaños de niña, o cuando abría un regalo al lado del arbolito de navidad. No quiero perder mi expresión mirando fuegos artificiales, no quiero nunca nunca perder mi sonrisa de esos momentos. La primera vez que vi la inmensidad del mar y me sentí tan chiquitita, mis muñecas, mis inventos, mis colecciones de miles de cosas diferentes. No quiero olvidar que ame y me amaron, que amo y aman. No quiero olvidarme de que el amor, existe. Y que suele doler mucho más que el desamor en algunas oportunidades. No quiero olvidar los besos que llevo contados. No quiero olvidar mi primer te amo, mi primer adiós. No quiero olvidar los llantos de cada 31 de diciembre. No quiero olvidar las historias, los caminos, los días felices, los días tristes. Las personas que están y las que se fueron, no quiero olvidar a todas aquellas se van a ir. No quiero olvidar, no quiero perder cosas, no quiero algún día dejar de sentir, no quiero que con el paso del tiempo me olvide de disfrutar el día a día. Aquellas tardes jugando en casa. Aquellos momentos, Aquellos años. Aquellos días. Aquella vida. No quiero olvidar que de a poco todo se olvida.