12 octubre 2010

Destino Cero

De cualquier forma nada sirvió, quizas me arrepiento de todo, quizas de nada. Hoy respiramos diferentes aires, hoy necesitaba que estuvieras para mí. Hoy necesitaba un abrazo, un beso, y que me pidieras que deje de llorar.
Era un cuenta gotas, que de a poco largaba porciones de sensaciones falsas, era una historia de esas que no se hablan. Era tu sombra a la noche, donde no me reflejaba. Eran las risas, la cama, la forma de pensar y la forma de tu cintura.
Eran tiempos de pensar, de cambiar, y de valerse por uno mismo.
Sigo sin creer, sigo sin creerte. Es más, nunca te creí. Alimentamos esta pantomima, a base de todo lo más vacio que pueda existir en una persona.
Quizás te sentias solo, quizas no logré conocerte lo suficiente para dame cuenta a quien estaba queriendo.
Y va a ser complicado, va a ser duro, va doler y a la vez va aniquilar todas las dudas.
Nunca te lo pregunte pero creo saber la respuesta, nunca me animé, por no poder escuchar lo que venia. Necesitaba una oportunidad, necesitaba hacerte saber que todo no era tan horrible como parecia, que realmente no estabamos tan solos, que me tenias a mi, y que por el momento no me importo si te tenia a ti.
Nunca dejé de volar, y con una soga trataba de levantarte, para que me siguieras. Nunca deje de entender de que venian las cosas. Nunca me animé a pedirte esa oportunidad.
Nunca te animaste a ser completamente sincero, nunca permitiste que tus dichos y tus actos sean lo mismo.
No digas más, ya dijiste todo. Ya dije todo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

No Quiero Olvidar

No quiero perderme en mi mismo laberinto. Las cosas que matan, las cosas que mueren, los días que inventan, las noches que invaden. Muchas cosas que se suceden a lo largo de nuestra vida, a pesar de en muchos casos, hacernos daño o doler porque ya ese instante termino, esas cosas que a veces son lo mismo y a veces no, no queremos olvidar. Otras queremos borrarlas para siempre y están grabadas en nuestras memorias y con su recuerdo nunca deja de existir esa lágrima en la mejilla, que tampoco se olvida. Yo quiero recordar para siempre cada instante, malo, bueno. no quiero olvidar los dias, las horas, los meses, los años. No quiero olvidar que hay mañanas que amanecen mejor, que hay sonrisas con motivos para seguir sonriendo, no quiero olvidar los “porque”, ni los “como” que a diario me pregunto. No quiero olvidar que ciertas miradas con solo ver sus ojos me basta para descifrar que esta pasando, no quiero olvidar, que mi mirada dice siempre algo más. No quiero olvidar que el mundo lo construyo yo cada minuto, y si pierdo un minuto pierdo mi mundo. No quiero olvidar que la risa no siempre es más fácil que el llanto, pero tampoco siempre es más divertida. No quiero olvidar que hay amores que duelen, amores que gozan y otros que ríen. No quiero olvidar algunos besos, algunos lugares, algunas personas. No quiero abandonar los días, las caricias, los perfumes que se siguen sintiendo, los mares de llanto. No quiero algún día olvidar como me sentía en mis cumpleaños de niña, o cuando abría un regalo al lado del arbolito de navidad. No quiero perder mi expresión mirando fuegos artificiales, no quiero nunca nunca perder mi sonrisa de esos momentos. La primera vez que vi la inmensidad del mar y me sentí tan chiquitita, mis muñecas, mis inventos, mis colecciones de miles de cosas diferentes. No quiero olvidar que ame y me amaron, que amo y aman. No quiero olvidarme de que el amor, existe. Y que suele doler mucho más que el desamor en algunas oportunidades. No quiero olvidar los besos que llevo contados. No quiero olvidar mi primer te amo, mi primer adiós. No quiero olvidar los llantos de cada 31 de diciembre. No quiero olvidar las historias, los caminos, los días felices, los días tristes. Las personas que están y las que se fueron, no quiero olvidar a todas aquellas se van a ir. No quiero olvidar, no quiero perder cosas, no quiero algún día dejar de sentir, no quiero que con el paso del tiempo me olvide de disfrutar el día a día. Aquellas tardes jugando en casa. Aquellos momentos, Aquellos años. Aquellos días. Aquella vida. No quiero olvidar que de a poco todo se olvida.